9 comentarios en “Lectura Enrico Ferri – AMOR Y MUERTE”
Pienso que la manera en la que se defiende al Sr. Cienfuegos es muy interesante y tiene una valiosa aportación a lo aprendido en la materia. El relato en detalle de la profundidad a la que pueden llegar los sentimientos; la manera por la cual se explica la muerte y el amor en sus diversas etapas, las mismas a las que el ser humano por su naturaleza no puede evitar; la descripción de la personalidad tanto de Hamilton como de Carlos mientras se van desglosando los hechos; y finalmente el argumento acerca de que Carlos Cienfuegos al momento del crimen obró con conciencia e inteligencia, pero con la voluntad paralizada, perturbada y cegado por una pasión que al ser herida llegó a su máxima expresión y culminó así en la comisión del crimen; todo lo mencionado hace que los presentes razonen acerca del derecho que tiene Carlos a invocar la no punibilidad de su accionar. De esta manera, pienso que es un relato entretenido del que se pueden obtener muchos aprendizajes tanto para el análisis de la materia como para el día a día.
A pesar de que a lo largo de la lectura se evidencian ciertas ideologías que en la actualidad ya han evolucionado, llama mucho la atención la manera en la que la defensa hace caer en cuenta lo importante que es analizar al sujeto activo y profundizar en el aspecto subjetivo que lo pudo llevar a la comisión del delito, para que en la medida de lo posible se llegue al fin último que es la justicia.
Desde la perspectiva de Ferri para la defensa, alega mucho la influencia de las pasiones sobre, todo el amor, sobre el elemento volitivo de la conducta. Establece que sería una forma de excusar la responsabilidad del imputado a través de esta, sin embargo, considero erróneo su razonamiento, pues más allá de la justicia que deben ejercer los jurados al dictar el veredicto; el apela a la moral y la cotidianidad de los actos donde el amor y el delito están juntos. Considero que el hecho de normalizarse una práctica atroz y des humana como quitar la vida motivado por las pasiones, no es motivo para eximir de responsabilidad a una persona.
Es interesante recalcar que, dentro de la defensa, usa como herramientas poetas e incluso la biblia, elementos que según el contienen la esencia de la conducta humana y en el caso de la biblia una base moral para construir la sociedad. Ambos contienen manifestaciones del amor como mecanismo para nublar la razón, caer en la tentación y delinquir, y aquel que cae bajo los efectos cegadores de esta no puede tener una responsabilidad si su actuar está justificado por servir a pasiones nobles como el amor.
Además, toma al amor y a los celos como una forma de perturbación de la voluntad, que no debe ser punible. Esta fue razón suficiente para que el jurado actuara erradamente y dejara absuelto a Cienfuegos. Finalmente creo que para la época fue un argumento sustentado y además que estuvo conducido a la vulnerabilidad de los jurados, por una materialización del amor en un crimen, dado que las circunstancias han cambiado esta figura no debería ser aplicada actualmente.
Es importante analizar las causas por las que se cometen los delitos, pero a su vez el derecho penal funciona en relación a bienes jurídicos protegidos, más que la moral o vulnerabilidad que puede presentar una persona. Además es necesario establecer si realmente no tuvo control sobre su voluntad, pues según la defensa de Ferri se abordan suposiciones que podrían justificar su conducta, mas no se demuestran.
Me gustaría comenzar recalcando como a lo largo de la lectura la defensa hecha a favor de Carlos Cienfuegos me parece bastante alejada de la realidad a la que estoy acostumbrado en el mundo del derecho penal actual. Una defensa con argumentos cargados de alto contenido poético, menciones a teorías y filosofías poco convencionales. Dicho esto una de las partes que mas llamo mi atención fue cuando el autor cita a Francesco Carrara y la distinción que este realiza entre dos tipos de pasiones (ciegas o razonadoras), solo el hecho de llegar a concebir que bajo esta distinción una persona que asesine a otra encontrándose bajo la influencia de una pasión razonadora (Ejem: amor o temor) pueda darsele una condena menor o incluso absolverlo es impensable analizándolo desde la óptica de nuestro días. Ademas que seria bastante difícil de aplicar esto, ya que se tendría que terminar los criterios bajo los cuales una persona actuó bajo uno u otra «pasión», criterios que en su mayoría son altamente subjetivos, dejando la decisión a la arbitrariedad del juzgador. Por ultimo es imperativo mencionar que ahondando mas en el tema pude confirmar el pensamiento de Ferri, el mismo que nos dice que «el homicida por amores contrarios, por honor ofendido, por fanatismo político, etc…merece atenuantes, y, según los casos, hasta el perdón o la absolución» y esta forma de pensar la justifica en base a que estas pasiones normalmente ayudan al progreso de la vida en sociedad, una idea que desde luego respondía a la cosmovisión de la época. Sin duda los crímenes pasionales son de los que mas continúan causando gran conmoción social , muchas veces afectada por el morbo que generan los medios de comunicación en torno a este tipo de acontecimientos.
Desde mi punto de vista me alegra de cierta forma que en la actualidad los crímenes ya no sean juzgados desde el grado de pasión ya que en ese entonces no se juzgaba la magnitud del delito sino la fuerza del amor o de los celos que los convertía en eso y principalmente por ese motivo se decidía si absolver a un persona de lo que hacía o no por que según se creía esta persona lo hacía por amor o por temor y esto fue la forma por la que se juzgaba un delito por mucho tiempo y me alegra que haya terminado y que en la actualidad se le juzgue a la persona por la magnitud de los actos que comete y que se considere que ha cometido un delito sin ningún tipo de justificación y se de una pena justa a los actos cometidos
Los crímenes pasionales a lo largo de la historia han ido evolucionando poco a poco, en medida que hasta las decisiones legales han adoptado varias maneras de interpretar estos delitos, como por ejemplo el reducir la pena dependiendo el grado de pasión que ha usado la persona que delinque, cuando la pasión es fuerte entonces disminuye la responsabilidad, y si llega a ser muy fuerte, entonces anula la responsabilidad con lo antes dicho podemos decir que los crímenes pasionales tuvieron mucha influencia en el Derecho hacia algún tiempo.
Quien delinque por amor o por temor, debe ser absuelto, porque la pasión es ciega y le suprime el uso de la razón, el lado bueno del sistema procesal en esos tiempos es que algunos jueces si se tomaban el tiempo de examinar todas las circunstancias y ver el pasado de la persona que delinquía.
Últimamente los criminalistas han evaluado más los motivos determinantes del delito, la premeditación juega un papel importante por los argumentos que la gente expone antes de cualquier decisión de juzgar.
Pienso que la manera en la que se defiende al Sr. Cienfuegos es muy interesante y tiene una valiosa aportación a lo aprendido en la materia. El relato en detalle de la profundidad a la que pueden llegar los sentimientos; la manera por la cual se explica la muerte y el amor en sus diversas etapas, las mismas a las que el ser humano por su naturaleza no puede evitar; la descripción de la personalidad tanto de Hamilton como de Carlos mientras se van desglosando los hechos; y finalmente el argumento acerca de que Carlos Cienfuegos al momento del crimen obró con conciencia e inteligencia, pero con la voluntad paralizada, perturbada y cegado por una pasión que al ser herida llegó a su máxima expresión y culminó así en la comisión del crimen; todo lo mencionado hace que los presentes razonen acerca del derecho que tiene Carlos a invocar la no punibilidad de su accionar. De esta manera, pienso que es un relato entretenido del que se pueden obtener muchos aprendizajes tanto para el análisis de la materia como para el día a día.
A pesar de que a lo largo de la lectura se evidencian ciertas ideologías que en la actualidad ya han evolucionado, llama mucho la atención la manera en la que la defensa hace caer en cuenta lo importante que es analizar al sujeto activo y profundizar en el aspecto subjetivo que lo pudo llevar a la comisión del delito, para que en la medida de lo posible se llegue al fin último que es la justicia.
Desde la perspectiva de Ferri para la defensa, alega mucho la influencia de las pasiones sobre, todo el amor, sobre el elemento volitivo de la conducta. Establece que sería una forma de excusar la responsabilidad del imputado a través de esta, sin embargo, considero erróneo su razonamiento, pues más allá de la justicia que deben ejercer los jurados al dictar el veredicto; el apela a la moral y la cotidianidad de los actos donde el amor y el delito están juntos. Considero que el hecho de normalizarse una práctica atroz y des humana como quitar la vida motivado por las pasiones, no es motivo para eximir de responsabilidad a una persona.
Es interesante recalcar que, dentro de la defensa, usa como herramientas poetas e incluso la biblia, elementos que según el contienen la esencia de la conducta humana y en el caso de la biblia una base moral para construir la sociedad. Ambos contienen manifestaciones del amor como mecanismo para nublar la razón, caer en la tentación y delinquir, y aquel que cae bajo los efectos cegadores de esta no puede tener una responsabilidad si su actuar está justificado por servir a pasiones nobles como el amor.
Además, toma al amor y a los celos como una forma de perturbación de la voluntad, que no debe ser punible. Esta fue razón suficiente para que el jurado actuara erradamente y dejara absuelto a Cienfuegos. Finalmente creo que para la época fue un argumento sustentado y además que estuvo conducido a la vulnerabilidad de los jurados, por una materialización del amor en un crimen, dado que las circunstancias han cambiado esta figura no debería ser aplicada actualmente.
Es importante analizar las causas por las que se cometen los delitos, pero a su vez el derecho penal funciona en relación a bienes jurídicos protegidos, más que la moral o vulnerabilidad que puede presentar una persona. Además es necesario establecer si realmente no tuvo control sobre su voluntad, pues según la defensa de Ferri se abordan suposiciones que podrían justificar su conducta, mas no se demuestran.
Muy buen comentario en relación al elemento volitivo. Le quedo muy agradecida por su comentario y aporte para la materia y para el blog
Me gustaría comenzar recalcando como a lo largo de la lectura la defensa hecha a favor de Carlos Cienfuegos me parece bastante alejada de la realidad a la que estoy acostumbrado en el mundo del derecho penal actual. Una defensa con argumentos cargados de alto contenido poético, menciones a teorías y filosofías poco convencionales. Dicho esto una de las partes que mas llamo mi atención fue cuando el autor cita a Francesco Carrara y la distinción que este realiza entre dos tipos de pasiones (ciegas o razonadoras), solo el hecho de llegar a concebir que bajo esta distinción una persona que asesine a otra encontrándose bajo la influencia de una pasión razonadora (Ejem: amor o temor) pueda darsele una condena menor o incluso absolverlo es impensable analizándolo desde la óptica de nuestro días. Ademas que seria bastante difícil de aplicar esto, ya que se tendría que terminar los criterios bajo los cuales una persona actuó bajo uno u otra «pasión», criterios que en su mayoría son altamente subjetivos, dejando la decisión a la arbitrariedad del juzgador. Por ultimo es imperativo mencionar que ahondando mas en el tema pude confirmar el pensamiento de Ferri, el mismo que nos dice que «el homicida por amores contrarios, por honor ofendido, por fanatismo político, etc…merece atenuantes, y, según los casos, hasta el perdón o la absolución» y esta forma de pensar la justifica en base a que estas pasiones normalmente ayudan al progreso de la vida en sociedad, una idea que desde luego respondía a la cosmovisión de la época. Sin duda los crímenes pasionales son de los que mas continúan causando gran conmoción social , muchas veces afectada por el morbo que generan los medios de comunicación en torno a este tipo de acontecimientos.
Muy interesante su reflexión Christopher. Sus observaciones denotan una muy buena comprensión de la materia y buen aprovechamiento del semestre.
Desde mi punto de vista me alegra de cierta forma que en la actualidad los crímenes ya no sean juzgados desde el grado de pasión ya que en ese entonces no se juzgaba la magnitud del delito sino la fuerza del amor o de los celos que los convertía en eso y principalmente por ese motivo se decidía si absolver a un persona de lo que hacía o no por que según se creía esta persona lo hacía por amor o por temor y esto fue la forma por la que se juzgaba un delito por mucho tiempo y me alegra que haya terminado y que en la actualidad se le juzgue a la persona por la magnitud de los actos que comete y que se considere que ha cometido un delito sin ningún tipo de justificación y se de una pena justa a los actos cometidos
Gracias Daniela por su aporte
Los crímenes pasionales a lo largo de la historia han ido evolucionando poco a poco, en medida que hasta las decisiones legales han adoptado varias maneras de interpretar estos delitos, como por ejemplo el reducir la pena dependiendo el grado de pasión que ha usado la persona que delinque, cuando la pasión es fuerte entonces disminuye la responsabilidad, y si llega a ser muy fuerte, entonces anula la responsabilidad con lo antes dicho podemos decir que los crímenes pasionales tuvieron mucha influencia en el Derecho hacia algún tiempo.
Quien delinque por amor o por temor, debe ser absuelto, porque la pasión es ciega y le suprime el uso de la razón, el lado bueno del sistema procesal en esos tiempos es que algunos jueces si se tomaban el tiempo de examinar todas las circunstancias y ver el pasado de la persona que delinquía.
Últimamente los criminalistas han evaluado más los motivos determinantes del delito, la premeditación juega un papel importante por los argumentos que la gente expone antes de cualquier decisión de juzgar.
Muchas gracias por su valioso comentario